Andy Warhol, Liz, 1964. Serigrafía en papel, 63.5 x 70.8 cm, Tate/National Galleries of Scotland.
La palabra glamur se utiliza para describir el encanto sensual que fascina. El glamur consiste en una idealización de algo que trasciende de lo cotidiano lleno misterio y lujo. Consiste en encubrir y revelar al mismo tiempo dándonos una imagen traslúcida, bella y elegante.
Elizabeth Taylor fue una de las mujeres más glamurosas del siglo XX. La actriz británica-estadounidense captivó al mundo con su espectacular y deslumbrante belleza y sus ojos color violeta. Pese a su intensa vida personal, el público deseaba verse como ella, vestirse como ella y ser ella. Su encanto natural, su sensualidad, su permanente estilo lujoso, su pasión por los diamantes y la idealización que se hizo de ella por su belleza y elegancia la hicieron convertirse en la imagen epítome del glamur. Andy Warhol, por el otro lado, no era una figura glamurosa en sí. No se vestía de manera lujosa ni era una figura sensual y encantadora. Sin embargo, el glamur era algo que a él le fascinaba. Su interés por él, hizo que se rodeara de figuras glamurosas como sus superstars. El artista fue una figura misteriosa ya que nadie ha sabido si todo era una gran broma para él o no. Su séquito de personas glamurosas y el misterio que lo rodeó lo hizo volverse una figura si no percibida como glamurosa a una a la que el glamur lo rodeaba.
La obra Liz de Andy Warhol es una de sus obras más glamurosas. Es un retrato de Elizabeth Taylor hecho en tintas de acrílico sobre lienzo hecho en serigrafía. Warhol la elige como el tema de su obra ya que como el resto del publico había sido cautivado por su glamur. La serigrafía es glamurosa no sólo por su tema y autor sino porque es una obra hecha de forma masiva como si fuera de consumo popular, pero manteniéndose como un bien de lujo. Por otro lado, la imagen de Elizabeth Taylor no es una imagen real de ella. Aquí no se ven sus colores naturales, ni sus ojos morados ni su perfecto maquillaje. El espectador se enfrenta a una imagen traslúcida de la actriz en el sentido de que no se ve una imagen nítida, pero aun así se ve a la bella y elegante Elizabeth Taylor.
El glamur no es una cualidad intrínseca de una persona u objeto. Es una cualidad que surge a través de una manipulación. Elizabeth Taylor fue glamurosa por la imagen que Hollywood hizo de ella. Andy Warhol se convirtió en una imagen glamurosa por el esfuerzo que hizo para que se relacionaran con él. La obra de Liz no es glamurosa por sus cualidades formales. El glamur de la obra consiste en la sensualidad de su temática, la idealización de las obras de Andy Warhol, la aceptación de sus obras como un objeto de lujo y el misterio detrás de su creador y su interés por las figuras glamurosas.